martes, 15 de octubre de 2013

MARATON INTERNACIONAL DE MEDGHACEN (ARGELIA)

Es difícil intentar plasmar tantos sentimientos, tantas emociones comprimidas en tan poco tiempo. Medghacen era mi primer maratón de asfalto, pero también una competición inesperada, difícil de preparar en dos semanas, después de mi participación en  Cavalls del Vent. Mi cabeza y sobretodo mi musculatura pedían descanso, y después de unos días intentando hacer un par de entrenamientos exprés, me rendí y decidí que lo mejor era descansar e intentar tirar de rentas el día de la competición.  


Reconozco que tenia algo de miedo, tal vez algo de incertidumbre frente a lo desconocido. Por una parte una distancia en asfalto con ritmos que no conozco y por otra, un país muy distinto al nuestro,  me planteaban un cosquilleo que me recorría el cuerpo de arriba a bajo. Pero una vez en Argelia todas estas dudas se convirtieron en vivencias inolvidables, paisajes de ensueño y sobretodo una amabilidad y un trato que nunca olvidaré, junto a mis compañeros de equipo (Juanjo, Jorge y José Antonio).


Primera Cena a la llegada a Argel.






El día de la carrera nos levantamos en la "Villa Olímpica" tal y como la bautizamos y nos dirigimos a la línea de salida que estaba justo a 500 metros. Y entonces empezó la fiesta; primero los alocados atuendos de competición de algunos de los participantes.


Luego los trabucos, tambores, el bullicio de la gente, y su particular forma de expresarse y de vivir los acontecimientos extraordinarios como era el caso,  y que convirtieron la salida en un auténtico espectáculo.  

Empieza la carrera y enseguida me siento cómoda con el ritmo, Jorge también, así que de forma natural mantenemos la misma velocidad, mientras tanto vemos como Juanjo se despega de nosotros como una avión a propulsión . Poco a poco llegamos a un grupo de dos chicas  que corren a buen ritmo (4,20 minutos el km aproximadamente) . 

Pronto conecto con ellas  y empezamos a colaborar, para mi sorpresa son muy simpáticas pese a que estamos compitiendo  y aunque van concentradas cada vez que las miro me sonríen y me animan para que continuemos al mismo ritmo. Su amabilidad es impresionante, hasta el punto que una de ellas me pide sostener mi botellín mientras  tomo mi gel. Yo no doy crédito y quedo maravillada con tanta cortesía.

No suelo hablar de los premios en metálico, pero por lo que acabo de contar, esta ocasión  lo merece, los premios rondaban lo que para un argelino representa los sueldos de 3 meses juntos, así que imaginaros como de impactada quedé al sentir la amabilidad de estás personas, que por encima de una posible recompensa económica valoraban una competición limpia y amistosa.

A mitad de carrera junto a mis compañeras.

Poco a poco la argelina no puede mantener el ritmo y se queda atrás , así que  continuo carrera con la marroquí , subcampeona de Marruecos que ostenta una mejor marca personal de 2h41´

A medida que transcurre la prueba y las condiciones empeoran con un gran calor y viento racheado, pero   mi agradable compañera mejora el ritmo y yo decido relajarme para terminar los últimos km disfrutando de las vistas.  Finalmente sería la ganadora de la prueba con un tiempo de 3h18´y yo en 2º posición con 3h24´


En el horizonte,  imposible olvidarnos del monumento motivo  del esfuerzo por el  que este pueblo Argelino organiza el Maratón  y que no es otro que el de reivindicar las ruinas  más antiguas del Norte de Africa  (s III y IV A.C. ) y conseguir que sean incluidas dentro del patrimonio Mundial de la Unesco. Y este  gran sueño es el que ha unido a nuestros  amigos  argelinos que han creído que el deporte podría ser la forma más bella  de luchar para conservar su patrimonio. Y esa, ha sido una gran idea¡¡


Además de estás, hay miles de anécdotas,  momentos e instantes que se quedan para nosotros, porque en Argelia pasaron y en Argelia se quedaran, pero que han hecho esta aventura sea una de las más enriquecedoras que he vivido a nivel personal y  como deportista. Una experiencia  intensa y muy vital que espero repetir en otra ocasión.


Entrega de premios.
Por último dar las gracias a nuestro anfitriones Azeddine Guerfi  y  Muhammad Djelloud, nuestro guía de  expedición, ya que no descuidaron detalle para que nos sintieramos como en casa durante nuestra estancia.


Muhammad Djelloud nuestro guía durante la expedición.

Os dejo con  un pequeño vídeo de la edición anterior... 




3 comentarios:

  1. Tu si que puedes decir que has corrido hasta en el desierto, seguro que la imagen de los avituallamientos con botellas de agua por los suelos llenas no se veria por ahi. Un saludico y felicidades.

    ResponderEliminar
  2. Para quitarse el sombrero
    ante toda ésta gente
    y ante ti
    Bsicos campeona

    ResponderEliminar
  3. ¿ es que no hay nada un pokito mas cerca ?. Jejejeje. Un saludo mákina.

    ResponderEliminar