lunes, 15 de julio de 2013

I ENCUENTRO DE MUJERES QUE CORREN POR LA MONTAÑA


Los tiempos han cambiado y la mujer cada vez ha ido haciéndose un hueco más respetable tanto dentro de las actividades deportivas, como en los deportes de montaña. Pero es cierto que el camino ha sido largo y aun no ha terminado. Es por eso que me ha parecido interesante extraer un fragmento del libro CUERDAS REBELDES de Arantza López, en el que se retrata la  vida de varias mujeres alpinistas. Nosotras somos corredoras, pero también nos encantas las montañas, la actividad física, el esfuerzo por llegar a una meta y las experiencias en la naturaleza en general,  por lo que el siguiente texto puede ser  transferido a las carreras de montaña;


Hace poco más de medio siglo que las mujeres empezaron a abrir huella en el mundo de la montaña. Hoy son cada vez más las que practican desde el esquí hasta el alpinismo, pasando por la escalada deportiva y las grandes paredes. Sin embargo a finales del siglo pasado, se les prohibía hacer ejercicio físico; aventurarse en las montañas era más que sospechoso y atarse a una cuerda para escalar en compañía de hombres era síntoma inequívoco de lesbianismo. A aquéllas, que lograban superar estos prejuicios, les quedaba todavía un largo camino que recorrer entre el acoso de la opinión pública, la incomprensión de sus familias y, lo que es peor la critica de algunos escaladores.

Afortunadamente las cosas han cambiado, sin embargo siguen habiendo determinados temas tabú que en ocasiones complican nuestros progresos deportivos. No somos ni mejores ni peores que un hombre corriendo, somos distintas. Tenemos otras virtudes y otros defectos, pero lo que tenemos en común es el derecho de poder disfrutar de este deporte con el que tanto disfrutamos.  No me gusta basarme en mi propia experiencia, porque cada mujer tendrá una; pero cuantas veces hemos escuchado ¿y ahora te vas a entrenar tu sola? ,¿No estarías mejor en casa? ¿ no crees que ya es hora de sentar la cabeza y hacer cosas normales para una mujer de tu edad?....




 Y aunque no todas las mujeres somos iguales, es cierto que por genética y hablando en términos generales tenemos  menos valores absolutos de fuerza o resistencia, pero también es cierto que somos más cuidadosas con nuestra práctica, más constantes, con una gran capacidad de dosificación  y por supuesto muy tozudas a la hora de perseguir nuestros objetivos, por lo que muchas veces somos capaces de igualarnos a los hombres en nuestros resultados deportivos. Otra de las cualidades que destacaría de forma muy positiva es la sensibilidad y el amor por la madre naturaleza que nos convierte en magnificas receptoras del medio y de la energía que nos aporta.
Nerea Martínez, una de mejores corredoras de Ultra Trail del mundo.

Edurne Pasaban, 1º mujer en subir los 14 ocho miles
Corinne Favre, además de pionera en las carreras de montaña, también  una de las mejores corredoras de todos los tiempos y todas las especialidades (desde km vertical hasta distancia ultra)
La idea de crear este evento nace de la voluntad de animar a otras mujeres a normalizar su práctica y contribuir a su formación deportiva. De hecho el II encuentro ya esta en el horno y la idea es ampliar la convivencia no sólo al entrenamiento, sino también con alguna charla sobre entrenamiento, alimentación, material.., así que espero que en ese II encuentro seamos más chicas.
El grupo de chicas antes de iniciar la salida.

Aquí os dejo el vídeo resumen de esta jornada, en la que  un grupo de más de quince mujeres  sin sentirnos raras, hemos compartido varias de las cosas que tanto nos gustan de la vida; correr, disfrutar de la montaña y la amistad con otras mujeres.



sábado, 13 de julio de 2013

LA RESPUESTA ESTA EN EL VIENTO

"Siempre he preferido ir más contra el viento que con él y a veces necesito su olor para que me indique el camino"  Reinhold Messner.

Todo empezó hace un par de meses, cuando mis analíticas se dispararon;  anemia,  un virus y varios valores alterados, no hacían presagiar nada bueno. Pero yo tozuda y reacia a admitir que había algo que no encajaba en todo este asunto, me  decidí a seguir con mis entrenamientos y mi calendario competitivo.

Con el tiempo, las dudas y las situaciones incomprensibles me llevaron a plantearme la posibilidad de haber caído en mi propia trampa. -¿sobreentrenamiento? -uf no puede ser- ya había recuperado bastante los valores de hierro, pero mi estado de salud seguía siendo una veleta. Las respuestas llegaron con el tiempo,  tal vez demasiado tarde, por la demora causada por errores en los procedimientos empleados en mi segunda analítica.  Confirmado;  mononucleosis o enfermedad del beso; enfermedad causa por el virus Epstein Barr y que se contrae por intercambio de saliva, besos, o lo que es muy común en deportes con avituallamientos como el nuestro; beber de un mismo vaso o botella.

Los síntomas más comunes y que no reconocí   son los siguientes;

  • Dolores musculares y articulares
  • Ganglios inflamados
  • Fiebre
  • Dolores de cabeza
  • Astenia (decaimiento y agotamiento)
  • Fatiga extrema
  • Apatía.

NO hay tratamiento, a parte de ingesta abundante de líquidos y  algo de ibuprufeno para el dolor. El tiempo de la enfermedad aunque suele durar 4 semanas en su fase aguda  es variable según la persona.

Ya han pasado un par de meses y me siento bastante recuperada. Pero es cierto que he necesitado desconectar, dedicar tiempo para mi, motivarme y volver a oler el viento. 



Llevo un mes entrenando con continuidad y en un par de semanas correré en Trans             D´havet. Soy consciente de que no voy a llegar con el ritmo de competición que me hubiera gustado, pero desde luego me parece una oportunidad inmejorable para recuperar la ilusión junto a mis dos grandes amigas Esther Sanchez y Belén Castillo y conocer Alpes Italianos.

Así que ya huelo a viento... y confirmo mi participación en Cavalls, ya que era una carrera que no tenia claro si correría, pero con las modificaciones de mi calendario espero llegar ya,  en mejor estado de forma. 


"Hay una grieta en todo, por ahí es donde entra la luz" (Leonard)